Un curso más, la web del Club Deportivo Caspe ha cubierto toda la actualidad del equipo caspolino en los últimos doce meses: noticias, resultados, clasificaciones, jugadores, vídeos, audios… y todo ello en las voces de sus principales protagonistas.
Se han publicado 242 audios y 328 informaciones con otras tantas fotografías, en su mayoría, con la firma de Erika Martínez Alcalde.
Los datos que nos deja este 2024 confirman los casi 5.600 accesos diarios (cada vez que un navegador requiere una página HTML) y cerca de 735.000 visitas anuales (peticiones al servidor WEB desde la misma dirección IP).
Las horas de mayor consumo comienzan a las tres de la tarde destacando sus picos a las siete (6,11%) y a las once de la noche (6,47%). Por la mañana, a las doce del mediodía (4,58%), es el momento con mayor número de visionados.
Datos que ni son mejores ni peores que otros, solo reflejan su relatividad con relación al contexto en el que se mueve el club, sus directivos, sus aficionados, la población que lo nutre y la oferta deportiva que transmite el cuerpo técnico y la plantilla.
Pero más allá de las cifras, que como queda dicho sirven para pulsar la respuesta de sus receptores, la actividad pregonada día a día da sensación de viveza, de avance, de guerra a la paralización, para asociar lo hecho y lo de por hacer como choque a una rutina sistemática.
Está bien que cada uno sume en su cometido, en su parcela. Que la complementariedad fije un dibujo global al que acudir para alejarse de la mirada a corto plazo, del atrevimiento egoísta que solo propone un trazo muy estrecho.
Los momentos puntuales, subjetivos, vistos como triunfo o fracaso, tienen cabida en el sentimiento oportunista, en su fugacidad, pero no sirven para definir la evolución de una sociedad, tanto si es una sociedad con mayúscula o con minúscula.
En definitiva, otro año que la página web cumple su objetivo. Por supuesto, con la anuencia de todos los componentes de la entidad caspolina y de aquellos que tienen la generosidad de pulsar en sus enlaces para conocer el estado actual y el pretérito, que en el caso del CD.Caspe, ya es centenario.